Soma nace de la necesidad de mejora social que vivimos, aplicada a las pequeñas cosas del día a día.
El diseño puede ser una gran herramienta para combatir los prejuicios y generar nuevos códigos visuales sin caer en estereotipos. Esta es la razón de ser de soma, una marca de salsas internacionales que busca escapar de los estereotipos culturales centrándose en el producto y la cultura de su país de origen.
Los estantes están llenos de ruido, llenos de etiquetas que representan prejuicios culturales a expensas de indicar al consumidor el país de origen. Un problema invisible que este proyecto busca corregir.
Soma busca centrarse en la representación del producto mediante su fragmentación, usando tipografía para encarnar cada ingrediente y hacer que esta componga imitando la forma natural del movimiento del mismo. Esto hace que, jugando con las transparencias, la etiqueta y la salsa se fusionen mostrando un producto de calidad, sin nada que ocultar.
El resultado gráfico confiere a esta marca un estilo contemporáneo, transparente, dinámico y diferenciador, mostrando a su vez, tras cada bote, guiños culturales a la forma de preparar las salsas que posee cada país o región.
Este es un pequeño proyecto centrado en usar el diseño gráfico como una herramienta comunicativa, más allá de lo estético.